Formación de Seguridad Laboral 170

proteccion cabeza ocular auditiva y respiratoria

Enfermedades por nanotubos

Fernando J Romero Valero, Facultativo Especialista de Área (FEA) de Neumología. Hospital Universitario Puerta del Mar de Cádiz (SAS)

Los nanotubos (CNTs) son estructuras tubulares cuyo diámetro es del tamaño del nanómetro (10-9 m), con longitud de hasta cm (figura 1). Es decir, son fibras muy finas y largas. Hay CNTs de muchos materiales, tales como silicio o nitruro de boro, pero generalmente el término se aplica a los nanotubos de carbono, descubiertos por S. Iijima en 1991 a partir de fullerenos, y des- critos en 1985 por Smalley y Kroto, por lo que se les concedió el Premio Nobel de Química en 1996. Los nanotubos pueden ser de pared simple (SWCNTs) o multipared (MWCNTs). Los grafenos son un subtipo de nanotubos y están conside- rados como el nuevo “wonder material”. Fueron descritos en 2004 por los rusos A. Geim y K. Novoselov, por lo que obtu- vieron el Nobel de Física en 2010. El grafeno es una hoja casi plana de grosor 0,1 nm (de 1 átomo de carbono), con aparien- cia de hoja de panal. Pueden ser monocapa, bicapa y multicapa (entre 3 y 10 capas). Aunque los nanotubos se conocen desde los años 80, e inclu- so antes, despertaron el interés investigador e industrial a prin- cipios de la década de los 90 de forma creciente. Desde 2006, la capacidad de producción aumenta exponencialmente, así como las publicaciones y patentes. En la mayoría de los casos se utilizan formando parte de ma- teriales compuestos, con resinas u otros materiales, lo que au- menta sus capacidades. Tienen cualidades de conductores/semiconductores y son fibras de alta dureza y resistencia, bajo peso y producción in-

dustrial relativamente fácil y barata, ya que se obtienen a par- tir del grafito. Es decir, tienen propiedades muy amplias y va- riadas y una fácil producción. Esto explica su uso exponencial y también el creciente interés científico e industrial por conse- guir nuevos materiales. Usos Las aplicaciones de los nanotubos son casi infinitas: electróni- ca, biotecnología, química, construcción, producción de ener- gía, fricción/lubricación, implantes, tejidos especiales, transpor- tes, filtros y muchas otras aplicaciones. Estos enunciados, que parecen irreales, ya están en nuestra vida cotidiana. La utilización de MWNTs para las pilas de telé- fonos móviles, notebooks , etc., ha sido un gran éxito comercial. Estas baterías, las últimas de grafeno, utilizan pequeñas cantida- des de CNT (1%) en ánodo y cátodo. Respecto a la biotecnología, ya disponemos de dispositivos nanométricos de almacenaje y liberación "in situ" de drogas para tratamiento oncológico, y la producción de prótesis óseas, por ejemplo, no parece lejana. Tampoco conseguir sistemas de in- terconexión neuronal, la solución para secciones neuronales. Ya disponemos de tejidos especiales para uso deportivo (ca- misetas) y militar, y también de exoesqueletos. Si conseguimos sustituir la tecnología de las desaladuras por nuevos filtros de nanotubos, que atrapen la sal con bajo gas- to de energía, se podría solucionar la falta de agua en gran par- te del mundo.

Patología producida por inhalación de nanotubos En 2010 (figura 3), Bonner expuso sus sos- pechas sobre las posibilidades patológicas de los nanotubos, teniendo en cuenta su se- mejanza estructural con las fibras de amian- to. Debemos puntualizar que los efectos de- penden del tipo de CNT y de la vía utiliza- da –no es lo mismo inhalar, instilar o aspirar; es más potente el efecto de la instilación tra- queal– y de factores intrínsecos de los CNTs (dimensiones, número de capas, tipo de su- perficie, impurezas metálicas, etc.) o extrín- secos (modelo animal, dosis, tiempo de ex- posición, condiciones experimentales…).

Más información: consultas@borrmart.es

82 Marzo-Abril 2020

Made with FlippingBook - professional solution for displaying marketing and sales documents online